En un significativo contexto histórico: Cuba intervenida por los Estados Unidos de América, una reprobable situación económica y todavía bajo una ardua efervescencia patriótica tras largos años de lucha por la independencia del país. Se aúnan esfuerzos para fundar una institución insignia de los bibliotecarios cubanos, donde participan sociedades culturales y científicas, así como varias e importantes bibliotecas institucionales y privadas existentes, que atesoraban lo más destaco de la literatura nacional y universal.
En la fecha del día 18 de octubre de 1901, fue promulgada entonces la Ley No. 234 por parte del gobierno interventor norteamericano, para la creación de la Biblioteca Nacional, ubicada en sus inicios en varios lugares de La Habana, sufriendo en sus inicios los avatares de la incomprensión de su importancia, la poca atención y apoyo del gobierno; no es hasta finales de los años 30 que comienzan a manifestarse acciones de apoyo a su mantenimiento, y a principios de los 40 se instrumentan la catalogación y calificación de sus fondos, adquisición de libros y la revista de la Biblioteca comienza a cubrir espacios dentro de la intelectualidad cubana de la época. Ya en los años 50 era poseedora la Biblioteca Nacional de uno de los fondos bibliográficos y documentales más importantes del país. Se logra entonces después de una ardua campaña por parte de sectores populares e intelectuales el financiamiento y construcción de su actual sede a finales de esta década.
El año 1959 marco una nueva etapa de vida para la Biblioteca Nacional, el triunfo de la Revolución significo su verdadera dimensión cultural y científica. El comienzo del desarrollo sociopolítico y cultural en el país determino su redimensión, ocupando un decisivo espacio en la vida de la sociedad cubana.
Se crearon y crecieron sus áreas de trabajo, surgieron los departamentos de Selección, Consulta, Referencia, Arte, Juvenil y otras importantes áreas especializadas. Entre lo más significativo en el desarrollo de la Biblioteca en esta etapa fue la creación de la Red Nacional de Bibliotecas Públicas, que actualmente cuenta con más de 450 Bibliotecas municipales, provinciales y sucursales, que ocupan como sede los más emblemáticos edificios de sus lugares.
La impronta de la Biblioteca Nacional, es constatable en los procesos culturales del país, el desarrollo alcanzado por la Red de Bibliotecas Públicas ha permitido que sean un eslabón determinante para los proyectos de potenciación de la cultura, las ciencias y las estrategias de un desarrollo próspero y sostenible que encamina la nación cubana. Constantes proyectos como el Concurso Leer a Martí y el Programa Nacional por la lectura, son parte de su quehacer diario.
Muy unidas sus líneas de trabajo con el desarrollo del país, que instrumenta el gobierno y el Partido Comunista de Cuba, se identifica la Biblioteca con la misión del encargo de compilar, publicar y difundir la bibliografía nacional publicada dentro y fuera del país por autores cubanos y se plantea como objetivos: adquirir, procesar y conservar el patrimonio bibliográfico nacional y lo más representativo de la literatura universal, además de promover bienes y servicios de información y comunicación, también atender metodológicamente a todo el sistema nacional de bibliotecas públicas, como eslabón primario del desarrollo socio-cultural y científico del país.
La Biblioteca en su amplia memoria histórica, atesora importantes colecciones que reflejan el quehacer histórico, político y social de Cuba, las especiales de Arte como es la de Wilfredo Lam, Raros y Valiosos, y decenas de otras colecciones más, conforman los numerosos archivos documentales, bibliográficos, artístico y sonoro que acaudala esta institución. El acceso online a estas colecciones y a otras en generales es: http://www.bnjm.cu/colecciones/?secc=colecciones
En estos tiempos mediados por la pandemia de COVID-19 la Biblioteca Nacional de Cuba ha tenido que reinventarse nuevas estrategias para continuar satisfaciendo a sus públicos, y para cumplimentar sus objetivos se han viabilizado y actualizados los accesos a su entorno digital, se han realizados resúmenes de catálogos de exposiciones, colecciones, sala de Arte y de otros espacios, también se han continuado la confección de bases de datos de los CD y DVD de sus fondos, las publicaciones digitales han realizado ediciones especiales con información diversa vinculada con las situaciones actuales, para ponerlos al alcance de sus públicos, son disímiles las actividades que se han realizado. (Torres González, 2020)
Recientemente, el día 13 de septiembre se celebró el día internacional del Bibliotecario y también de forma habitual el 7 de junio y en honor al padre de la bibliografía cubana Barchiller y Morales se celebra el día del bibliotecario cubano. Los espacios para el encuentro cultural y científico también se han denotado en los ambientes de la Biblioteca Nacional, son constante las actividades y eventos de carácter nacional e internacional que se organizan, como el Encuentro Científico Bibliotecológico "Emilio Setien Quesada in memoriam” que se realiza con el coauspicio de la Asociación Cubana de Bibliotecarios (ASCUBI).
Hoy 18 de octubre de 2021 se vistió de fiesta la Biblioteca Nacional José Martí al celebrar su 120 aniversario, la recién restaurada Sala–Teatro Hart fue la sede de este acto, y contó con la presencia del presidente de la Republica Miguel Díaz-Canell, que también inauguró la nueva sala para niños y jóvenes “Eliseo Diego”. La importancia de las Bibliotecas para el desarrollo del país fue resaltado y su vital papel en los proyectos culturales y científicos de la sociedad. Esta jornada festiva también fue espacio para la entrega a la Biblioteca Nacional de la condición de Monumento Nacional.